
Dicha catedral de los Santos Apóstoles y Mártires Pedro y Pablo, se inauguró con la presencia de 10 Obispos y numerosos sacerdotes y con la concurrencia de una enorme multitud de fieles, que también han colaborado con ésta casa de todos.
La consagración comenzó con la apertura de la puerta de la Catedral que atravesó el primero Mons. Mokobe, seguido por todos los fieles, como multitud que siguió a Jesucristo triunfalmente en Jerusalén.
Mons. Mokobe, animó a todos a tomar esta inauguración como una oportunidad para retomar la misión evangelizadora. Un signo de esta unión a la misión fue el traslado del cuerpo del primer vicario apostólico de Basankusu, el obispo misionero Gérard Wantenaar.
En recuerdo de aquellos primeros misioneros, en la sacristía, se abrió una exposición de fotos de aquella época y de aquellos pastores. Fueron ellos lo que abrieron las primeras escuelas y los primeros dispensarios médicos de la zona y crearon las misiones de los muchos afluentes del río Congo que fluyen en la zona de Basankusu.
Fuente: OMPPRESS.