“Que Dios les recompense por tanta
generosidad para con nosotros, sus nuevos sacerdotes”, es lo que les dice Luis
Eduardo Guzmán a todos aquellos que le han ayudado a cumplir su sueño: ser
sacerdote. Hasta hace poco era seminarista en el Seminario Intermisional San
Luis Beltrán, en Colombia. Un seminario que prepara a los sacerdotes de las
zonas indígenas y más pobres de Colombia. Son los 14 vicariatos apostólicos de
este país, considerados tan territorios de misión como lo puedan ser las
junglas del Congo o las regiones inhóspitas de Papúa. Un seminario al que
España estuvo ligada nada más crearse, allá por los años sesenta, cuando un
grupo de sacerdotes del Instituto Español de Misiones Extranjeras se encargó de
la formación de los primeros seminaristas.
Luis Eduardo se acaba de ordenar y sus
sentimientos de gratitud los comparten sus compañeros, también recién
ordenados: Héctor Manuel Rincón, Francisco Javier Bolaños, Luis Emilio Jiménez.
Agradecen el apoyo de las Obras Misionales Pontificias de España que, gracias a
la generosidad de los católicos españoles con la campaña de Vocaciones Nativas,
han tenido el privilegio de ayudar directamente al seminario donde se han
formado estos jóvenes. Con lo recaudado en la campaña del año pasado – la de
este año se celebra este próximo 27 de abril – España les ha hecho llegar
22.592,93 dólares para que todos estos jóvenes sepan que ellos son un regalo de
Dios para toda la Iglesia, no sólo para Colombia.
Son los herederos de tantos
misioneros que llegaron a esas tierras a llevar el Evangelio y son la esperanza
de la Iglesia.
“La ayuda recibida es de vital importancia
para que nosotros, jóvenes provenientes de familias pobres y humildes, podamos
realizar nuestros estudios”, aseguran estos valientes jóvenes. Valientes,
porque ya están trabajando, recién ordenados sacerdotes, en aquellas
“periferias” de las que habla el Papa Francisco. “Mi apostolado” – cuenta
Héctor Manuel Rincón – “lo desempeñaré en el Vicariato Apostólico de Trinidad
en el Casanare, lugar donde es necesario impregnar los valores del Evangelio
con gran esfuerzo”.
Valientes, porque tristemente Colombia ha
encabezado en el año 2013 la lista de países con mayor número de misioneros y
agentes pastorales asesinados. Nada menos que 7. Y no es la primera vez. Los
cuerpos de dos de los sacerdotes asesinados fueron encontrados en zonas
aisladas, días después de haber desaparecido. La realidad diaria y social de
algunas zonas de Colombia es conocida. Y es ahí donde Luis y sus compañeros
desempeñan su ministerio, algo que casi hace recordar a nuestro Señor: “Mirad
que os envío como ovejas en medio de lobos…”.
Con la cercana campaña de Vocaciones
Nativas de este 27 de abril, Obras Misionales Pontificias de España quiere que
todo católico español, con sus oraciones y su cooperación económica, se sienta
orgulloso de estos muchachos, de estos “nuestros nuevos sacerdotes”.
Fuente: OMPPRESS 10/04/2014